Cuando por primera vez vemos esta postura pensamos que es la más fácil de todas. Sin embargo, el maestro B.K.S. Iyengar, quien dió origen al Yoga Iyengar, afirma que es una de las posturas más complicadas de dominar, ya que la conexión entre cuerpo y mente no debe perderse.
Savasana es la postura perfecta para terminar cualquier clase de asanas, ya que su objetivo es alcanzar la relajación absoluta de los músculos del cuerpo y del sistema nervioso. De hecho, es una de las posturas más importantes del Yoga restaurativo y el momento cumbre para finalizar una práctica de Vinyasa yoga.
En el siguiente post, vamos a profundizar en el verdadero significado de Savasana o postura del cadáver y averiguar los múltiples beneficios que aporta una sesión de tan solo 10 minutos en esta postura. ¿Te lo vas a perder?
Savasana y su significado
La palabra “sava” en sánscrito significa cadáver. Savasana o postura del cadáver se remonta al Yoga Hatha Pradipika, un texto del siglo XV donde se recogen las primeras descripciones de esta postura que se sigue practicando a día de hoy. En efecto, tal es su importancia que, es la única asana que se repite en todas las series.
En la cultura oriental, la muerte junto al nacimiento son los momentos más importantes de la vida y los que dan el significado a la misma, a la existencia. Se preparan para el momento de morir durante sus vidas, así la acogen sin sufrimiento, sin miedo. Y es que, el miedo a la muerte es lo que deriva en el resto de nuestros miedos interiores.
Se podría decir que Savasana es la práctica de la muerte. La muerte de lo material, del mundo ajetreado que nos rodea, de toda cosa que impide nuestra felicidad. En esta postura se pone de manifiesto el trabajo que hay que hacer con la mente y el cuerpo para llegar a relajarnos. A no hacer nada, y eso está bien.
Asimismo, con Savasana te das cuenta de que somos más que un cuerpo humano. Al desaparecer los estímulos y distracciones de nuestro cuerpo físico, serás capaz de conectar con tu mente y conocerte mejor.
“En el yoga, una muerte consciente marca una etapa de transición de esta vida humana a la eternidad”.
Yoga restaurativo: escucha a tu cuerpo
Las clases de yoga restaurativo suelen ser series con pocas asanas, que tienen una duración mayor que otras. En este sentido, la postura estrella para finalizar cualquier práctica es Savasana.
A medida que transcurre la sesión y que la práctica se incrementa, se purifica el prana interior y se relaja la sensación de estrés que aparece. Esta postura es ideal para escuchar a tu cuerpo después de una serie de asanas. Así lo calmamos y permitimos que la tensión física desaparezca, ayudando a nuestros músculos a memorizar y canalizar lo aprendido.
Si no terminas con Savasana, perderás la sensación de relajación y felicidad del post-yoga.
Las meditaciones más profundas se producen en Savasana. Un ejemplo de esto se produce al practicar el Yoga Nidra, que se suele hacer durante una meditación guiada. En este momento nuestro cuerpo se conduce a un estado entre la consciencia y el sueño, donde se aprende a interiorizar con nosotros mismos y conocer que nuestro cuerpo y mente van más allá del plano físico.
Cuando entras en el estado de relajación profunda y escuchas a tu cuerpo, se obtienen grandes recompensas. Una de ellas, que está científicamente demostrada, es que las personas que practican Savasana son menos propensas a padecer estrés y depresión, no sólo durante la práctica, sino también en sus vidas cotidianas.
El estudio está recogido en la National Journal of Basic Medical Sciences de Mysore, una revista nacional del Instituto de Mysore (India). El mismo, estaba compuesto por un grupo de 65 estudiantes de medicina sanos, en un rango de edad de 18 a 20 años.
En conclusión, el estudio demostró que la práctica regular de Savasana disminuyó el ritmo cardíaco en reposo y que permite a uno mismo alcanzar el control del sistema nervioso parasimpático. Sistema que desacelera el corazón, dilata los vasos sanguíneos, actúa sobre el estrés del organismo y reduce los músculos del aparato digestivo, lo que facilita la digestión.
Técnica para realizar Savasana
Para poner en práctica Savasana o postura del cadáver te recomiendo que sigas las siguientes pausas, indicadas por el maestro Iyengar:
- Es una postura de descanso supino, por tanto, debes acostarte en el suelo con las palmas de las manos hacia arriba y relajando los dedos.
- Los brazos y las piernas deben estar ligeramente separados del cuerpo. Los pies deben quedar relajados, es decir, inclinados suavemente hacia afuera.
- Cierra los ojos. En este punto es recomendable usar un antifaz o tela doblada para profundizar en la relajación y que no moleste el parpadeo o las sombras.
- Busca la relajación. Comienza con una respiración profunda para que sea cada vez más lenta. Concentrándose en que sea delicada al espirar para que las fosas nasales no sientan el calor del aliento.
- Relaja la mandíbula, no la aprietes. También relaja poco a poco la lengua y las pupilas mientras sigues respirando lenta y profundamente.
- Relájate por completo y continúa respirando muy despacio.
- Permanece en esta posición durante 15-20 minutos. Mientras más tiempo consigas permanecer mejor será para ti.
- Y lo más importante, ¡no te duermas! Es más complicado de lo que parece, debes permanecer relajado, pero consciente.
Para aquellas personas que sufran dolor en la espalda, es conveniente que realicen Savasana con las rodillas dobladas y los pies sobre el suelo, o que utilicen un cojín finito para colocarlo en la zona lumbar, pudiendo descansar. Para practicar esta postura durante el embarazo, es recomendable que se apoye la cabeza y el pecho sobre una almohada.

Otras posturas de yoga para relajar el cuerpo
Además de entrar en Savasana, y en sus variantes, para descansar cuerpo y mente, también existen otras posturas que facilitan la relajación:
- Balasana o la postura del niño.
Es una postura de descanso en la que se puede entrar en cualquier momento de la práctica y perfecta para yoguis principiantes. Algunos de sus beneficios son: reducir la fatiga, relajar la musculatura de los hombros y espalda baja, y aliviar los dolores de cabeza.
- Adho Mukha Svanasana o el perro boca abajo.
Tal vez para un principiante en el yoga puede resultar incómoda. No obstante, con la práctica pasa a ser una de las posturas activas de descanso.
Es una postura que ayuda a energizar el cuerpo, reducir la fatiga, aportar flexibilidad y fortalecimiento, a la vez que se estimula el sistema nervioso.
Beneficios de practicar Savasana o postura del cadáver
Los beneficios para el cuerpo de esta postura, es que te permite alcanzar una relajación corporal al máximo. Siempre hay que escuchar y poner atención a todos los detalles que nos vaya diciendo para conocerlo mejor y saber qué necesita.
Fisiológicamente, se consigue calmar el sistema nervioso, facilitando que la sensación sea más profunda hasta calmar las emociones. Si lo logras, conseguirás conectar con el presente, en un estado de observación.
En definitiva, algunos de los beneficios que te aporta Savasana son:
- Relajar el cuerpo.
- Reducir la presión arterial.
- Calmar el cerebro, aliviar el estrés y la depresión.
- Reduce el dolor de cabeza, el insomnio y la fatiga.
En resumen
La práctica de Savasana te aportará ese momento de relajación profunda que tanto necesita tu cuerpo en estos días.
Cuando consigas desconectar para conectar contigo mismo en la etapa de finalización del yoga, descubrirás la incorporación del amor universal y la felicidad trascendente de tu cuerpo y mente.
¡Practica y libérate de tus miedos!